Ésta, es una variante de la receta que publiqué en Diciembre del año pasado. La podéis ver aquí: ROLLOS DE AGUARDIENTE
INGREDIENTES
3 Tazas de aceite de girasol de 1/4 de litro. Podemos hacerlo también con aceite de oliva suave
1 Taza de zumo de naranja
La ralladura de la piel de 2 naranjas, (sólo la parte amarilla)
1 Taza de anís dulce. La podemos sustituir por aguardiente o mitad y mitad.
1 Taza de azúcar
3 Gaseosas, (gasificante para repostería)
1.300 Gr. de harina
2 o 3 cucharadas de leche y 3 o 4 de azúcar para la terminación de los rollos
PREPARACIÓN
Ponemos en un bol el aceite y le añadimos la ralladura de naranja.
Incorporamos el zumo de naranja.
Añadimos el azúcar y vamos mezclando todo. Echamos las gaseosas de los papeles blancos, removemos con una cuchara de madera e incorporamos la harina a través de un colador o tamiz, poco a poco, en la que habremos mezclado las gaseosas de los papeles de color.
Vamos mezclando con la cuchara de madera y llegará un momento en el que tendremos que meter las manos para terminar de amasar.
Formamos una especie de bola.
Preparamos dos platitos, uno con leche y otro con azúcar. Vamos cogiendo pellizcos de la masa del tamaño de una nuez y le damos forma de rollo, (primero hacemos una bola, a continuación la estiramos girándola entre las palmas de las manos haciendo un cilindro y luego unimos las puntas cruzándolas), pasamos la parte superior del rollo por la leche y seguidamente por el azúcar. Esto les dejara, una vez horneados, una costra crujiente estupenda.
Vamos colocando los rollos en la bandeja del horno.
Los horneamos a 200º unos 25 minutos por bandeja, hasta que estén dorados a nuestro gusto.
Los dejamos enfriar y los podemos conservar en una lata de galletas o un tuper. Se conservan perfectamente crujientes y hojaldrados más de un mes, aunque están tan ricos que desaparecen enseguida.