CHIPS DE ALCACHOFAS CON HUEVOS ROTOS

Las alcachofas me encantan de cualquier forma, pero con ésta he triunfado en casa. Quedaron fantásticas, crujientes sabrosas....un lujo que no puede ser más sencillo.

INGREDIENTES (Para 2 personas)

6 o 7 Alcachofas, (depende del tamaño)

4 Huevos

50 Gr. de jamón

Una pizca de pimentón

2 Dientes de ajo

Sal

Aceite de oliva para freír

PREPARACIÓN

Empezamos por preparar las alcachofas. Les quitamos las hojas exteriores, hasta llegar a las que están tiernas, les cortamos las puntas y recortamos un poco la parte del rabo. Como las vemos en la siguiente foto.

Las cortamos en láminas finas, de medio cm. de grosor aproximadamente.

Preparamos un recipiente con agua y un chorro de vinagre. Las vamos metiendo según las cortamos, para que no se oxiden. Hay quién las restriega con un limón, pero este método es más cómodo y funciona bien.

Cuando tenemos todas preparadas, las enjuagamos bajo el grifo para quitarles el vinagre, las secamos con papel de cocina y las freímos en una sartén con un par de dedos de aceite de oliva. Las tenemos que dejar doradas, para que estén crujientes. Por supuesto a mitad de fritura les damos la vuelta. Las freímos poco a poco, no echando todas de golpe.

Nos quedan más o menos así. Cuando las sacamos de la sartén, las podemos poner unos segundos sobre papel absorbente, para eliminar el exceso de aceite. Les ponemos un poco de sal, poca, pues el jamón les da un toque de salado.

El jamón, yo lo he cortado en taquitos pequeños, pero igual lo podemos hacer en virutas, en lonchitas o como nos apetezca.

Terminadas las alcachofas, quitamos el aceite, lo colamos para quitarle los restos de hojas de alcachofa. En la sartén, sin aceite, le damos al jamón una vuelta rápida, lo sacamos y reservamos.

Volvemos a poner el aceite en la sartén, echamos los dos dientes de ajo, que habremos aplastado un poco y cuando se doren los sacamos. A quien no le guste el sabor del ajo, que omita este paso. Cuando el aceite está bien caliente vamos friendo los huevos. A mi me gustan con puntilla.

Ponemos en el plato las alcachofas, colocamos por encima el jamón y los huevos. Espolvoreamos un poco de pimentón por encima de los huevos, los rompemos para que escurra la yema y nos comemos todo antes de que se enfríe.

BACALAO FRESCO CON COSTRA DE ALIOLI

Esta receta de bacalo fresco es muy sabrosa y no puede ser más sencilla. La receta la he sacado de un blog portugués: La casita verde. Los portugueses son unos maestros a la hora de preparar el bacalao, hacen unos bacalaos deliciosos.

INGREDIENTES

2 Lomos grandes de bacalao. Éstos pesaban aproximadamente 1 Kg.

1 Vaso de alioli con mostaza.

1 Cucharada de aceite de oliva virgen extra (AOVE)

Sal

PARA EL ALIOLI CON MOSTAZA:

1 Huevo

1/4 Litro de aceite de oliva suave, (si no queremos que sepa demasiado a aceite lo podemos mezclar con  aceite de girasol)

1 Diente de ajo grande o dos medianos

1 Cucharada de mostaza de Dijon

Sal

PREPARACIÓN

Empezaremos por preparar el alioli. El huevo es mejor tenerlo fuera del frigorífico unas horas antes de hacer la salsa. Echamos en el vaso de la batidora el ajo troceado, el huevo, un poco de sal y cubrimos con aceite, un par de dedos por encima de los ingredientes.

Metemos la varilla apoyándola en el fondo del vaso y sin moverla nada la ponemos en marcha, cuando empiece a ligar vamos echando el resto del aceite poco a poco, sin mover la varilla. Cuando veamos que espesa, la movemos despacio arriba y abajo para que se mezcle bien todo. Ya tenemos el alioli hecho.

Le añadimos la cucharada de mostaza y mezclamos sin miedo.

Aquí tenemos el resultado.

Al comprar el bacalao le decimos al pescadero que nos saque los lomos. Ya en casa repasamos y le quitamos las espinas que le queden, que posiblemente sean las del lateral.

 En una bandeja de horno echamos un chorrito de AOVE y colocamos encima los lomos cortados en porciones de ración.

Les ponemos sal y echamos una buena capa del alioli tapando toda la superficie.

Un rato antes calentamos el horno a 180º, calor arriba y abajo. Metemos la bandeja y cuando esté dorada la capa de alioli, el pescado estará listo. Tardará unos 20 minutos. Si queremos dorarlo más, los últimos 5 minutos ponemos el grill del horno y acercamos un poco la bandeja.

SAQUITOS DE CALABACÍN CON QUESO DE CABRA

Estos saquitos de calabacín, queso de cabra y piñones, hechos con masa Filo, están riquísimos, son fáciles de hacer y de verdad que sorprenden, quedan crujientes por fuera y jugosos por dentro, el queso de cabra queda fundido. El resultado me ha encantado. 

INGREDIENTES (Para 4 saquitos)

8 Hojas de pasta filo de 30 x 40 cm aproximadamente. Dos hojas por saquito.

1 Calabacín mediano

4 Rebanadas de queso de rulo de cabra de 1,5 cm de grueso

4 Cucharadas de cebolla caramelizada

1 Cucharada de mantequilla

2 Cucharadas de piñones

1 Cucharada de aceite de oliva virgen extra (AOVE)

Sal

PREPARACIÓN

Pelamos el calabacín, lo cortamos en dados de 1 cm. de lado aproximadamente, ponemos la cucharada de AOVE en la sartén y echamos los daditos de calabacín, le ponemos un poquito de sal y lo salteamos a fuego medio unos minutos, hasta que se pongan un poco blandos. Los apartamos y reservamos.

Ponemos unas gotas de AOVE en una sartén y tostamos los piñones, con cuidado para que no se quemen. En cuanto se pongan dorados, los sacamos y reservamos.

Sacamos la masa filo, cortamos las hojas por la mitad y el resto del paquete lo cerramos bien y lo guardamos en el frigorífoco para que no se sequen las hojas, pues se partirían al manejarlas y no nos servirían.

Fundimos la mantequilla en el microondas.

Ponemos la primera media hoja en la mesa de trabajo, pintamos toda su superficie con la mantequilla derretida.

Ponemos otra media hoja sobre la anterior en sentido contrario, la volvemos a pintar con mantequilla y así hasta poner 4 medias hojas, pintamos cada una de ellas con la mantequilla.

Colocamos en el centro la rebanada de queso de cabra.

Sobre esta ponemos una cucharada grande del calabacín.

Encima ponemos una cucharada de cebolla caramelizada. La receta la podéis ver aquí: CEBOLLA CARAMELIZADA. Sobre la cebolla colocamos unos piñones tostados.

Cerramos el saquito. Podemos ponerle, como vemos en la foto, un cebollino para atarlo, pero no hace falta, simplemente girando y presionando un poco las hojas de masa filo se quedan formados. Engrasamos la placa del horno, o bandeja donde vamos a hornearlos y los ponemos encima.

 El horno le precalentamos a 180º  mientras formamos los saquitos y metemos la bandeja en el horno hasta que estén dorados, aproximadamente 15 minutos. Los retiramos y servimos.

TRIÁNGULOS DE MANZANA CON MASA FILO

La masa FILO es muy socorrida y agradecida para pasteles, tartas y un montón de rellenos dulces y salados. Vamos a hacer unos sencillos pastelitos de manzana, que se hacen en un momento y quedan crujientes y buenísimos, todo un lujo. Esta masa, que está refrigerada,  se encuentra ya en casi todos los supermercados.

INGREDIENTES

4 Hojas de masa filo de unos 30 por 40 cm. (Dependiendo de la marca que utilicéis tendrá distintas medidas).

2 o 3 Manzanas. Si tenéis Reinetas, estupendo, si no Golden o cualquiera que sea un poco ácida.

1 Cucharada de azúcar moreno

El zumo de 1/2 limón

2 Cucharadas de pasas sin semillas

1 Cucharadita de canela en polvo

2 Cucharadas de mantequilla para pincelar la masa y 1 para hacer el relleno

1 Cucharada de azúcar glas 

PREPARACIÓN

Vamos a empezar preparando el relleno. Pelamos las manzanas, les quitamos el corazón y las cortamos en daditos. Ponemos en una sartén una cucharada de mantequilla y cuando se derrita echamos las manzanas, las pasas, el azúcar moreno y el zumo de medio limón. Ponemos el fuego medio y movemos. 

En unos 4 0 5 minutos quedará hecho. No hacerlo demasiado pues se haría puré, la manzana debe quedar un poco al dente, que cuando le clavemos la punta de un cuchillo entre con facilidad, pero que no se deshaga la manzana. Si queremos le podemos añadir unas nueces troceadas.

La masa filo viene en hojas muy finas y no la debemos sacar hasta el momento de utilizarla pues en contacto con el aire se seca y no la podríamos doblar sin romperla. Las hojas que no utilicemos las guardamos en el paquete, lo cerramos bien y lo metemos en el frigorífico. Para cada triángulo vamos a utilizar una hoja de 30 por 40 cm. aproximadamente. Extendemos la hoja en la mesa de trabajo.

La pintamos con la mantequilla, que habremos derretido poniéndola unos segundos en el microondas.

La doblamos por la mitad, por el lado más largo.

Volvemos a pintar con mantequilla y colocamos un par de cucharadas del relleno, como vemos en la foto.

Doblamos haciendo un triángulo y le damos a éste un pincelazo de mantequilla.

Volvemos a doblar el triángulo sobre si mismo, pincelazo de mantequilla y seguimos.

Así hasta el final de la hoja.

Al final, el resto que nos quede, que no nos de para otro triángulo, lo doblamos como vemos en la foto.

Nos quedará un paquetito de forma triángular. Lo pintamos con la mantequilla derretida por ambas caras y lo colocamos en la bandeja del horno, que habremos precalentado a 180º.

Los horneamos hasta que los veamos dorados, unos 15 minutos.

Dejamos que se enfríen un poco y les ponemos azúcar glas por encima con ayuda de un colador.

Los tomamos templados y podemos acompañarlos, por ejemplo, con una bola de helado de vainilla.