Me llamaba la atención el resultado de hacer un bizcocho en la freidora de aire. El éxito ha sido absoluto. La única diferencia con el horneado de forma tradicional es el tamaño, que según el modelo que tengáis de freidora, podrá ser mayor o menor. Mi airfryer es de 3,5 litros y el molde que he utilizado, que cabía justo, tiene 18 cm. de diámetro. En tan sólo 25 minutos de horneado a 160º, más 5 de precalentamiento ha salido un delicioso bizcocho. Por supuesto he reducido las cantidades a las que a continuación podéis ver.
INGREDIENTES
1 Yogur natural
1/2 Medida de vaso de yogur de aceite de oliva suave
1 Medida de vaso de yogur de azúcar
2 Medidas de vaso de yogur de harina
Ralladura de naranja o limón
1/2 Sobre de polvo de hornear, (8 Gr)
Un poco de azúcar para espolvorear por encima, (una cucharada)
PREPARACIÓN
Para amasar he utilizado una amasadora pero podemos perfectamente hacerlo con una batidora de mano, con una thermomix, o simplemente con una varilla de mano.
Ponemos los huevos con el azúcar y batimos unos minutos hasta que blanqueen.
Añadimos la ralladura de limón, el yogur, el aceite y una pizca de sal. Mezclamos bien hasta que se integren todos los ingredientes.
Incorporamos la harina y el polvo de hornear, tamizándolo.
Engrasamos un poco el molde y le espolvoreamos un poco de harina para que no se pegue. Vertemos la mezcla, le espolvoreamos un poco de azúcar por encima y lo ponemos en el cesto de la airfyer, que habremos precalentado 5 minutos.
Programamos 25 minutos a 160º y la ponemos a trabajar. No abrirla antes de 15 o 18 minutos para que no se baje el bizcocho. En el tiempo indicado me ha salido perfecto, aunque supongo que cada modelo de airfyer puede hacer que varíe algo el tiempo y la temperatura. Yo lo he tenido justo el tiempo indicado. Pinchamos el bizcocho con un palillo y comprobamos que está bien hecho. Dejamos el bizcocho 5 minutos más, dentro, con la freidora apagada.
Lo sacamos y desmoldamos cuando se enfríe.