domingo, 29 de mayo de 2016

PICANTONES ASADOS


Los Picantones son pollos que pesan alrededor de medio kilo,  apenas tienen grasa y su carne es muy tierna y delicada. Hoy los he preparado con una receta muy sencilla,  muy rápida  y  que quedan muy crujientes por fuera y tiernos y jugosos por dentro. Para acompañarlos he preparado una ensalada con hojas de lechuga variada, de las que vienen envasadas, acompañada de una manzana en trocitos y aliñada con sal, zumo de limón y aceite de oliva virgen extra. 

INGREDIENTES: (Para dos personas)


2 Pollos Picantones

1 Limón

1 Ramita de romero

Una cucharadita de hierbas provenzales

6 Dientes de ajo

Sal, pimienta molida y aceite de oliva virgen extra.

PREPARACIÓN


Empezamos por preparar los Picantones, les retiramos los restos que pudieran tener de plumas, los lavamos bien por dentro y por fuera y los secamos. Los salpimentamos por dentro y por fuera, metemos dentro de cada uno  tres dientes de ajo aplastados  1/2 limón, al meterlo lo exprimimos un poco con los dedos para que suelte parte de su jugo dentro y una ramita de romero. Podemos echarle otras hierbas, según nuestro gusto  o lo que tengamos en casa.

Una vez preparado ponemos una sartén o cazuela que luego podamos meter en el horno, echamos un chorreón de aceite de oliva virgen extra (AOVE) en el fondo de la sartén y cuando esté bien caliente colocamos los Picantones de costado, apoyados en la parte del ala. Echamos una cucharada de AOVE por encima, un poquito de hierbas provenzales, unas hojas de romero, un poco de pimienta y los dejamos unos 6 o 7 minutos, hasta que veamos que se han dorado por la parte en contacto con la sartén.


Les damos  la vuelta y ahora los apoyamos por el otro costado, repetimos la operación. Pasados otros 6 o 7 minutos, se habrán dorado.


Ahora los giramos poniendo las pechugas hacia arriba. Volvemos a dejarlos otros 6 o 7 minutos.


Una vez dorados los giramos y esta vez les dejamos las pechugas hacia abajo, otros 6 o 7 minutos.


Mientras hacemos estas operaciones, precalentamos el horno a 200º y metemos los picantones 7 u 8 minutos, para que se terminen de hacer. Una vez pasado este tiempo, los sacamos del horno y los dejamos reposar 5 minutos, tapándolo con un papel de aluminio al que habremos hecho un par de agujeros para que salga el vapor.


Lo servimos, le echamos por encima el jugo que ha quedado en la sartén, y lo acompañamos con ensalada, o patatas fritas o asadas, o ambas cosas.


martes, 24 de mayo de 2016

CROQUETAS DE BACALAO



Estas croquetas de bacalao son toda una delicia. Los croqueteros como yo, las vais a disfrutar. Como cuando se pone uno a hacer croquetas,  lleva su trabajo y su tiempo, una vez metidos en faena  es mejor hacer una buena cantidad y congelar las que no nos vayamos a comer,  una vez rebozadas. Con las cantidades que he puesto han salido 38 croquetas del tamaño de una pelota  de ping pong o un poco más grandes.

INGREDIENTES



225 Gr. de bacalao desalado

1/2 Cebolla o una si no es muy grande

1,1 Litros de leche entera

35 Gr. de mantequilla

35 Gr. de aceite de oliva virgen extra, más una o 2 cucharadas para sofreír el bacalao

140 Gr. de harina

1 Huevo duro

Una pizca de pimienta y otra de nuez moscada, (opcional)

PARA EL REBOZADO: 2 huevos, harina y pan rallado.

PREPARACIÓN


Si el bacalao no está desalado, lo ponemos la noche anterior a desalar con agua en el frigorífico, cambiando un par de veces el agua. Yo lo compré en su punto de sal y me ahorré ese trabajo. Desmenuzamos el bacalao con los dedos y reservamos. Por otra parte ponemos a cocer un huevo 10 minutos en agua hirviendo, lo pelamos, lo picamos y reservamos.



En una sartén ponemos 1 o 2 cucharadas de aceite de oliva y cuando esté caliente incorporamos el bacalao desmenuzado, lo movemos y tenemos al fuego un par de minutos para sofreírlo. Lo sacamos y reservamos.


Cortamos la cebolla en brunoise y reservamos. En una cazuela  o sartén,  yo utilizo una sartén grande de acero inxidable,  ponemos los 35 gr. de mantequilla y los 35 gr. de aceite de oliva virgen extra. 


Cuando se funda la mantequilla, incorporamos la cebolla, un poco de sal y dejamos que se haga a fuego medio hasta que esté bien blandita, removiendo de vez en cuando.


Cuando tenemos la cebolla pochada, añadimos la harina.


Con una varilla de mano, mezclamos todo bien, sin parar de mover y lo tenemos en el fuego 4 o 5 minutos para que se cocine un poco la harina y evitar que  nos sepan las croquetas a harina cruda.


Ahora es el momento de incorporar poco a poco la leche. Para que no salgan grumos es mejor hervirla para tenerla bien caliente, pero si la incorporamos muy poco a poco tampoco nos deben salir los grumos aunque la leche no la hayamos calentado. En esta ocasión la he hervido, otras veces no.


Ahora viene el trabajo más pesado, hay que mover todo con energía para que se mezcle, vamos echando la leche de cazo en cazo, no echando más leche hasta que la anterior se haya integrado perfectamente.


Le ponemos la pizca de pimienta y nuez moscada, si hemos decidido utilizarla. La bechamel la tendremos cociendo unos 10 o 12 minutos. De momento no le he puesto sal, por si acaso el bacalao ha quedado un poco salado, prefiero hacerlo al final. Si a pesar de todo nos han salido grumos, la solución es pasarle el brazo de la batidora y queda perfecta. Cuando ya está hecha, incorporamos el huevo picado y el bacalao. 


Mezclamos y sin dejar de remover, tenemos todo al fuego unos 2 o 3 minutos para que se mezclen los sabores, ahora es el momento de probar la bechamel para corregir el punto de sal.


Echamos la masa en una fuente ligeramente aceitada, en cuanto se enfríe un poco, tapamos la bechamel con un papel film, pegándolo a la masa para que no se reseque y en cuanto esté fría la metemos en el frigorífico un mínimo de 2 o 3 horas. Si la hacéis un día para formar las croquetas al siguiente, mejor. 


Vamos a formar las croquetas, yo lo suelo hacer con dos cucharas. En esta ocasión les he dado forma redonda. 


Aunque no tengan la forma perfecta, después las terminamos de moldear.


Preparamos tres platos, uno con harina, otro con huevo batido y el tercero con pan rallado.


Las pasamos primero por harina y les terminamos de dar forma con las palmas de las manos, que al tener la harina ya no se nos pegará la masa a las manos.


A continuación las pasamos por el huevo batido  y finalmente por el pan rallado.


Preparamos un recipiente con abundante aceite de oliva, para que las croquetas queden cubiertas. Si no se cubren totalmente es más fácil que se abran al freírlas. Cuando el aceite está bien caliente las freímos hasta que se doren a nuestro gusto.


Las sacamos y depositamos en papel de cocina para que suelten el exceso de aceite y las servimos .


jueves, 12 de mayo de 2016

COCIDO A MI MANERA


En casa con cierta frecuencia preparamos un cocido, siempre es distinto pues cambiamos las carnes, las verduras, etc. Éste es un cocido sencillo y riquísimo con pocas complicaciones. Cada vez que lo hacemos, sabemos que en los siguientes días vamos a preparar platos derivados de él, que están tan ricos o más que el propio cocido, como ROPA VIEJA, ARROZ CON RESTOS DE COCIDO ( dejo los enlaces) y como no, unas buenas croquetas de cocido que publicaré más adelante.

En cada región y en cada casa se prepara el cocido con distintos ingredientes, a gusto de cada uno y con los productos que existen en la zona y podemos ir añadiendo productos según nos parezca, judías verdes, morro de cerdo, lacón, morcilla, etc, etc. 

INGREDIENTES (las cantidades son aproximadas, con lo que he puesto sale cocido para 4 personas y queda para hacer al día siguiente Ropa Vieja y Arroz de Cocido)


250 Gr de garbanzos puestos en remojo la noche anterior

2 Muslos y contramuslos de pollo

1 Trozo de de morcillo de ternera

1 Trozo de Tocino Ibérico

1 Hueso y una punta de jamón serrano

2 Chorizos

Una ramita de apio

1 Puerro

1/2 Col

2 Zanahorias

2 Patatas

Sal

Aceite de oliva virgen extra para echar un chorrito sobre las verduras y patatas cuando las servimos en el plato. En el propio cocido no le pongo aceite pues ya lleva las grasas del chorizo y el tocino.

PREPARACIÓN

La noche anterior ponemos los garbanzos en remojo con agua templada. A mi me gustan de la variedad Pedrosillano, son un poquito más pequeños que los habituales pero dan un resultado excelente.

Ponemos agua abundante en una olla, yo lo hago en olla a presión, cuando esté caliente incorporamos las carnes, excepto el chorizo y también los garbanzos, si los metemos en un saquito de los que venden para tal fin, quedan mucho mejor, es mas fácil sacarlos luego y no se despellejan.


Dejamos que hierva unos minutos y retiramos con un cazo la espuma que se forma por encima, que proviene de las impurezas de la carne.


Tapamos la olla y dejamos que cueza 15 minutos desde que empieza a salir el vapor, abrimos la olla, añadimos las zanahorias, el apio y el puerro, y dejamos que cueza 10 minutos más pero sin cerrar a presión la olla.


Aparte, en otra olla,  vamos a cocer la col con las patatas y los chorizos. Lo hago así porque a veces los chorizos dejan el caldo muy rojo y la sopa puede saber demasiado a chorizo. Ponemos agua a cocer y añadimos los ingredientes y un poco de sal. Dejamos que cueza unos 10 minutos hasta que veamos que la patata esté hecha.


En esta ocasión, que los chorizos no han soltado demasiada grasa, colamos el caldo y lo mezclamos con el que teníamos en la olla a presión. Si hubiera salido demasiado rojo, utilizaríamos sólo una parte, esto va en gustos. Probamos de sal y rectificamos si fuera necesario. La sal prefiero poner poca al principio y ajustarla al final, para no pasarnos.


En casa solemos tomar en primer lugar un poco de sopa hecha con parte caldo y unos fideos.


A continuación nos servimos cada uno un poco de cada carne, de verduras y patata, le echamos un chorreón de aceite de oliva virgen extra y listo.