
Un guiso sencillo y muy rico. En esta época del año apetecen un montón los platos de cuchara. Las albóndigas están hechas con carne de ternera y de cerdo a partes iguales, pero podemos hacerlo con la que prefiramos. Con estos platos nunca se falla.
INGREDIENTES
1/2 Kg de carne picada, en este caso ternera y cerdo
850 Gr. de patatas
2 Zanahorias
1 Tomate, (no está en la foto)
1 Cebolla grande
2 Dientes de ajo
1 Huevo
2 Hojas de laurel
100 Ml de vino blanco
Un poco de pan rallado, dos o tres cucharadas. Puede ser un poco de miga de pan remojada en leche y escurrida
Sal y pimienta al gusto
Un poco de perejil
1 Cucharadita de pimentón
Un poco de harina para formar las albóndigas.
PREPARACIÓN
Ponemos en un bol la carne picada, la salpimentamos, añadimos el perejil, el ajo triturado y el huevo.
Mezclamos todo y añadimos el pan rallado para que absorba la humedad y se puedan formar mejor las albóndigas. Mezclamos todo muy bien.
Vamos a formar las albóndigas, yo lo hago poniendo un poco de harina en un vaso, echo una cucharada de de la mezcla que tenemos en el bol y agito el vaso con movimientos rápidos circulares. En seguida se forma la albóndiga. Si lo prefieres las haces con las palmas de las manos, pero el truco del vaso funciona muy bien.
Las vamos reservando en un plato. Para comprobar que están bien de sal echamos un poquito de carne para que se fría, la probamos y rectificamos si es necesario.
Mientras las vamos formando, las freímos en una sartén con aceite. No es necesario que se hagan por completo pues se terminarán de cocer con la salsa. En cuanto veamos que se han dorado por toda la superficie, las sacamos sobre papel de cocina para que absorban el exceso de aceite.
En una cazuela preparamos la salsa. Picamos finamente la cebolla y pelamos y cortamos las zanahorias en trocitos. Ponemos la cazuela al fuego con unas 3 cucharadas de aceite y echamos la cebolla, la zanahoria y las hojas de laurel, añadimos un poco de sal y dejamos que se vaya pochando todo.
Cuando la cebolla empiece a dorarse Echamos la cucharadita de pimentón, removemos e incorporamos el tomate rallado o picado finamente.
Incorporamos las patatas peladas y cortadas cháscándolas en trozos de bocado.
Vertemos el vino blanco y dejamos un par de minutos para que se evapore el alcohol.
Cubrimos con agua y dejamos que cuezan las patatas hasta que estén bien hechas.
Cuando la patata esté blandita, incorporamos las albóndigas, probamos de sal y rectificamos si es necesario. Dejamos que cueza todo junto unos 8 o 10 minutos y listo.